Más que abajo de mi piel estoy yo. Nunca absuelta, nunca entera.Soy un mar de bocanadas estrechadas al "nunca jamás" .  Y ahí, nauseabunda juego a atrapar puñados de lo que creo que soy.

Y es que somos entes de la ausencia. Del no ser; porque en ese camino de reconocer lo que se es, se esfuma toda certeza. Estamos tan llenos de nostalgia y desentendimiento que viajamos ciegos por la carretera de la vida. Viajamos atados al recuerdo donde todo es concreto.

Comentarios

Entradas populares de este blog